Después de las marchas y eventos para conmemorar el día internacional de las personas con discapacidad, la pregunta es: Y después del 3 de diciembre ¿qué sigue?¿cómo logramos que todos los reclamos de inclusión se cumplan?
La discapacidad está en todas partes; si alredor del 15% de la población mundial vive con alguna discapacidad (aproximadamente 1000 millones de habitantes, según cifras del Banco Mundial y de la OMS), ¿Por qué entonces no la vemos?¿por qué no está representada en las imágenes dirigidas a promocionar productos, servicios y eventos culturales, sociales, recreativos o deportivos que reflejan la diversidad de nuestras sociedades?
Ya sea de nacimiento o adquirida, sea vivida en primera persona o por alguien muy cercano, nadie puede considerarse exento de tener un acercamiento a la discapacidad en algún momento de su vida. Y sin embargo, las personas con discapacidad y sus necesidades, siguen pareciendo invisibilizarse en el día a día de una sociedad que habla de inclusión, casi por moda, pero que sigue queriendo esconder bajo el tapete a todo aquel a quien perciba como “diferente” por su aspecto, modo de actuar y reaccionar o su forma de interactuar socialmente. A la persona con discapacidad se le ve desde sus limitaciones o diferencias, como “algo fuera de lo normal”, porque…simplemente no se sabe como comportarse en su presencia, y lo que no sabemos nos incomoda.
Si eres fan de los K-dramas, y ya viste “Nuestro Horizonte Azul” en Netflix, recordarás la escena en que Park Jung Joon trata de explicar su reacción al descubrir sorpresivamente que la hermana gemela de novia es una persona con Síndrome de Down.
“—-no tuve la mejor reacción, pero traté de entenderlo. Nunca había visto a alguien como ella, me sorprendió, pasó y lo siento. Ni en la escuela ni en casa, me enseñaron como reaccionar al conocer a un discapacitado.”
En la realidad, ni en la familia ni en la escuela nos enseñan. En la realidad, muchas veces la invisibilización de la discapacidad comienza en la familia, con el “no le mires, no sea que se ofenda”. Aún, incluso, cuando dentro de la familia extensa, es muy probable, que alguien viva con discapacidad.
En el contexto cotidiano, la discapacidad se invisibiliza y se deshumaniza, porque aún conservamos como lastre prejucios derivados de los enfoques que conceptualizan a la discapacidad como algo negativo, indeseable y vergonzoso. Cómo sujetos de látima o mala suerte, que no son económicamente productivos y por lo tanto, como una carga social, cuando en muchos casos ni siquiera se le brindan las oportunidades y adecuaciones necesarias para su desarrollo, haciendo infinito el círculo vicioso de discapacidad, pobreza y dependencia, derivado de la falta de oportunidades de empleo, educación, acceso a la salud y mayor costo de vida para cubrir los requerimientos de su atención.
“—…a la hora de entrar me mira todo el mundo,… y luego es como si desapareciese , porque cuando viene el camarero le pregunta a mis amigos ¿dónde la colocamos?…..pues realmente me vuelvo invisible.»
En el mejor de los casos, algunas y muy contadas personas con discapacidad, son reconocidas como una excepcionalidad, como seres extraordinarios, que se han sobrepuesto a sus “impedimentos” para lograr el reconocimiento en algún ramo del quehacer humano, más comunmente, en el arte. Porque para el talento, no hay barreras, ¿o si? ¡por supuesto que sí! La falta de oportunidades, la falta de adecuaciones, la falta de accesibilidad, la violación a los derechos humanos están por todas partes!
¿Sabías que a pesar de que existe el “Acuerdo por el que se emiten los criterios y especificaciones técnicos para la accesibilidad de las personas con discapacidad a los inmuebles de la Administración Pública Federal” y el “Manual de Normas Técnicas de Accesibilidad de la CDMX, que regulan las dimensiones del Espacio público, edificaciones, áreas de servicio, servicios sanitarios, para que el diseño de los espacios públicos de la ciudad sea Accesible para cualquier persona, esto en muchos casos no se cumple, o las mismas autoridades optan bloquear dichos accesos debido al mal uso que hacen de ellos sus ciudadanos?
Te dejo solo un ejemplo, pero mira a tu alrededor… rampas de acceso que no cumplen con las especificaciones técnicas de dimensión y declive o bien se encuentran parcialmente obstruidas por otros elementos del mobiliario urbano como postes, macetones, etc.; banquetas de acceso a hospitales en pésimas condiciones que dificultan la circulación de sillas de ruedas, muletas y andadores; accesos a sitios públicos en que no existen rampas, ni elevadores, imposibilitando el acceso a pisos superiores a personas con movilidad reducida y ni hablar de puentes peatonales accesibles; botones de elevadores y picaportes elevados; sistemas de turnos digitales e incluso de terminales punto de venta, que no toman en cuenta a la discapacidad visual y un largo, largo etc. Aunado a la continua invasión y bloqueo de los espacios accesibles, como cajones de estacionamientos, rampas, sanitarios para Pcd, por parte de los ciudadanos.
La discapacidad no sólo sigue enfrentando las barreras de siempre, sino que se le siguen agregando otras, en medio de la inconsciencia social que no piensa en la discapacidad…hasta que le toca.
Una caída, un accidente, una enfermedad, el envejecimiento, el nacimiento de un hijo/a con alguna condición genética o con algún transtorno del desarrollo… muchas razones impredecibles o no tanto, que deberían hacernos reflexionar de lo cercana que puede estar la discapacidad de nosotros, pero seguimos empecinados en pensar que lo que no vemos no existe, así que seguimos prefiriendo ocultarlo, segregándolo.
Bajo pretextos heredados de los prejuicios ancestrales, seguimos pidiendo inclusión pero sólo para los nuestros y vemos al resto de las discapacidades como “¿pero y si se lo contagia a mi hijo?” cuando llega un niño/a con alguna discapacidad a la escuela o al centro deportivo, o aún cuando estamos buscando escuela de educación especial.
Tenemos tan mal concepto de la discapacidad en general, que cuando se habla del autismo como una discapacidad (y es que está reconocida como una discapacidad psicosocial), no falta quien se ofende y argumenta “no son discapacitados, son muy inteligentes” (¿?) Siempre me he preguntado que tiene que ver una cosa con la otra. Existe el autismo Con Discapacidad Intelectual y Sin discapacidad intelectual. La inteligencia, no es un argumento que excluya vivir con discapacidad, Stephen Halwking fue reconocido como uno de los cerebros más brillantes del mundo, y sus múltiples discapacidades (producto de la esclerosis lateral amiotrófica) nunca hicieron menos importantes sus aportaciones a la ciencia.
“Las personas con discapacidad son aquellas que tienen deficiencias físicas, mentales, intelectuales o sensoriales a largo plazo que, en interacción con diversas barreras, pueden obstaculizar su participación plena y efectiva en la sociedad en igualdad de condiciones con los demás.” (Organizacion Panamericana de la Salud)
Y la mayor parte de las barreras siguen siendo las que provienen de otras personas.
Se habla de una escuela inclusiva, una escuela para todos, pero no existen las adecuaciones, ni estructurales, metodológicas ni de materiales, ni la capacitación al cuerpo docente y administrativo, ni la sensibilización de las comunidades escolares (padres y madres y vecinos incluidos). Al mismo tiempo, se reducen presupuestos a la educación especial, a los programas de integración laboral para personas con discapacidad, y a pesar de reconocer que la población que vive con discapacidad es más vulnerable a que se violenten sus derechos, siguen siendo un colectivo del que las autoridades se acuerdan “solo para la foto” y la captación de votos.
La discapacidad debe dejar de verse como algo «fuera de lo normal», como algo «que solo le pasa a otros», para entenderse como una parte integrante de la extensa diversidad humana, donde lo «normal» es que todos seamos diferentes, pero cada persona merece el mismo respeto.
Si la mayor parte de las barreras son sociales ¿Qué vamos a hacer distinto, como persona, como familia, como gremio, como sociedad, para que las cosas cambien? ¿qué vas a hacer tú?
Referencias:
Banco Mundial, (19 marzo 2021), Discapacidad. Recuperado de https://www.bancomundial.org/es/topic/disability
Organización Mundial de la Salud (26 noviembre 2021), Discapacidad y salud. Recuperado de https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/disability-and-health
Organización Panamericana de la Salud, Discapacidad, recuperado de: https://www.paho.org/es/temas/discapacidad#:~:text=Las%20personas%20con%20discapacidad%20son,de%20condiciones%20con%20los%20dem%C3%A1s.
