Por: Psic. Omar Arispe Peláez
Antes de la pandemia que aqueja hoy día nuestro planeta, nos era difícil tener datos acerca de la situación laboral de las personas con autismo. Actualmente, el COVID-19 trae consecuencias en todos los sectores y la comunidad interesada en el tema del Espectro Autista debería preguntarse ¿Cuántos puestos de trabajo habrán perdido personas autistas? ¿Cuántos proyectos emprendedores han muerto en vísperas del 1 de mayo?
Antes de la pandemia, la tasa de desempleo de las personas con autismo era elevada y quienes logran obtener un empleo, lo hacen en puestos de bajo nivel donde no se les paga adecuadamente por las actividades que realizan.
La familia de la persona con autismo frecuentemente es la encargada de buscarle un empleo y ayudarle a organizar un estilo de vida laboral posible, ya que las oportunidades de trabajo son muy pocas llegando a la vida adulta.
Una vez que se reactive la economía al finalizar esta emergencia sanitaria ¿Qué papel tendrá el emprendedor neurodivergente?. El objetivo será empezar de cero, empezar a construir el proyecto con acciones de autogestión y adaptados a las características de la persona a partir de ajustes razonables y acciones significativas llegando a un fin claro. Una vez que acabe la emergencia sanitaria, un daño colateral será el desempleo, que en nuestro país es y SERÁ uno de los principales problemas sociales que nos aqueja -vivamos con la condición del espectro autista o no-.
Curiosamente, en México está muy cerca el festejo el DÍA DEL NIÑO (30 de abril) y el DÍA DEL TRABAJO (1 de mayo) y la condición del Espectro Autista parece que está condicionado a la idea de que esas “personitas” son únicamente niños y aunque los vean crecer, se les condena ser “niñotes”. La consecuencia obvia que te infantilicen es asumir que una persona no podrá ser capaz de ser una persona productiva con algún proyecto alternativo o acciones emprendedoras.
@Ali Unzu D Aje nos dice “Aunque siempre se habla del autismo en los niños, lo cierto es que algunos adultos con TEA…son capaces de trabajar con éxito en determinados puestos de trabajo”
Con nosotros, sin nosotros y a pesar de nosotros seguirán demostrando el valor productivo y sobre todo personal nuestros emprendedores neurodivergentes. Recordemos, personas diferentes con desafíos similares…nada tiene que ver con el autismo. Resulta fácil entrar al “trend” de la discusión sobre el emprendimiento, se nos dice que una vez que termine la pandemia se reactivará la economía y debemos apoyar los pequeños negocios o productores locales. Hagamos que nuestro dinero llegue a personas con autismo y demos la oportunidad de demostrar que lo que hacen ellos está bien hecho.
¿Tú que servicios contratabas o adquirías de personas con autismo antes de la pandemia?
Psicólogo Omar Arispe Peláez
Psicoterapeuta interesado en temas del espectro autista desde hace 15 años. Hoy coordinador de un proyecto emprendedor para adultos con TEA llamado El Espacio Azul.
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